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¡Con el Lonko y con el Piuke!, su candidato a Concejal Arturo Cheuke luchará en el municipio por los derechos del pueblo mapuche y de todos los leftrarinos!
Pretendía ser el primer Concejal Mapuche del pueblo donde nació, estuvo a punto de lograrlo, a muy pocos votos del último Concejal electo entre 30 candidatos, pero esto no ha desanimado a Arturo, quien desde su niñez ha sido un activo dirigente mapuche de la comunidad Mateo Ñiripil. Pero más que dirigente ha sido un Awcadi (asesor del lonko, el que está siempre al lado de él) como él dice, pero eso es sólo a nivel de su comunidad, ya que como dirigente ha tenido una conocida trayectoria en la Comuna.
De niño estudió en la escuela del sector y luego terminó su enseñanza básica en la Escuela Nº 6 de Lautaro; no tuvo más estudios, pero ello no le ha impedido estar en el centro de las actividades de su comunidad y de participar como dirigente en la iglesia católica, vicepresidente de la asociación indígena El Toqui, de Lautaro, a cuyas actividades están afiliadas 70 comunidades.
Desde hace unos seis años se halla inscrito en los registros del partido Demócrata Cristiano, del que durante varios años fue un simple simpatizante. Con pesar expresa su pesimismo ante la desunión de su pueblo, que en la parte política nunca ha podido elegir un concejal debido a que siempre van varios candidatos pero por distintos partidos políticos.
Dice que si hubiera sido elegido concejal habría luchado por dar más presencia al pueblo mapuche en las actividades municipales de la Comuna. Especialmente se habría preocupado de que hubiera lamien (mujeres) atendiendo a visitas y turistas vestidas con los atuendos mapuche en el Centro Cultural; que hubiera una oficina de informaciones turísticas en el verano; dar un mayor difusión al ícono que recuerda el primer parlamento entre mapuches y españoles, efectuado a orillas del río Quillem en 6 de enero de 1641. Estas y otras iniciativas culturales quedaron en su carpeta de candidato a la espera de una nueva elección.
Reconoce que las políticas actuales están permitiendo que los jóvenes mapuche tengan más conciencia acerca de su pueblo y participen más en los actos ceremoniales de las comunidades, pero eso no basta, estamos en el corazón de La Araucanía y debe hacerse más en este sentido.
Con su esposa se dedican a la fabricación de artesanías y participa en ferias de Lautaro y la región, preferentemente se dedican a la confección de chaigües (canastos), pifilcas de madera, wamkos (bancos) de madera, palin (palos para jugar chueca), tejidos en lanas y otras artesanías que comercian como cultrunes, (tambor ceremonial) azucareros, sacajugos y una serie de productos de la artesanía local.
“Con el lonko y con el piuke” (con la cabeza y el corazón) fue el lema que lo hizo popular en la última elección, el que difundía desde su camioneta roja en la que tenía pintado también su nombre y los datos de su lista. A muchos les caía bien su propaganda, porque ven él al típico mapuche empeñoso, sagaz, que anda un poco metido en la política y en las oficinas públicas dando una mano a sus peñis o promoviendo algún proyecto de interés; siempre luciendo sus prendas mapuches, lo que lo hace inconfundible por su trato cordial y su dedicación a los temas de su pueblo.
